SIN NOVEDAD EN EL FRENTE
En esta misma hora
Cecilio estaría sangrando la vaca:
le diría “quieta” con su voz nocturna.
Y Antonio en esta misma hora, escribiría
con su letra patoja, “recibido.”
¿Qué haría Luis? Quizás le ayudaría
a su hermano menor hacer sumas y restas,
quizás se despidiera de su madre
pasándole la mano por el pelo.
(Cecilio, Antonio, Luis, nombres conjeturales
para rostros nacidos de otros rostros)
Cecilio es negro como el faldón con flores de su madre.
Antonio tiene acné y sufre los sábados
cuando va a un baile y ve a una muchacha hermosa.
Luis es largo y amable y virgen todavía.
En esta misma hora,
uno mira hacia el sur, donde su hermana
ha encendido una vela. Un gallinazo
picotea su frente. El otro
parece que estuviera cantando, tan abierta
tiene la boca a tan temprana hora. La misma
en que el tercero,
(largo y amable y virgen todavía)
parece que durmiera
con una flor de sangre sobre el sexo.
Sobre su pecho hay un escapulario.
Todo en el monte calla.
Ya alguien vendrá por ellos.